Hoy en día la mayoría de los españoles que acceden a Internet lo hacen a través de un dispositivo móvil. Esto no lo decimos nosotros, sino el informe La Sociedad de la Información en España 2015, realizado por la Fundación Telefónica, en el que se observa que el 88,3 % de usuarios acceden a través de esta vía, superando por primera vez al ordenador como punto de acceso.
Partiendo de esta base, conviene recordar para aquellos que no lo sepan cuál es el concepto de responsive E-mail: Se trata de la adaptación de tu correo electrónico a todos las resoluciones y tamaños de los smartphones, con el objetivo de conseguir una buena experiencia de visualización e interacción gracias a un diseño adecuado.
Es una realidad que los clientes prefieren interactuar con páginas que posean este diseño que con las que no. Pero, si es tan efectivo, ¿por qué es tan reciente? El factor determinante reside en las dificultades de diseño que supone el HTML y CSS en lo que al E-mail se refiere. Pero dadas las estadísticas previas y gracias a los avances tecnológicos, concluimos que la adaptación al correo en los móviles no debe ser una opción, sino una prioridad.
¿Cómo podemos crear un diseño responsive en lo relativo al E-mail marketing? Te damos 5 pautas para conseguirlo.
· PRIORIZACIÓN
Hay muchas compañías que ofrecen servicios de E-mail, aunque según el estudio de Litmus Email Analytics (actualizado en Diciembre 2016) los 5 más importantes acaparan un 70% de la cuota de mercado:
Teniendo esto en cuenta, la priorización y centralización en estos cinco es vital, para posteriormente ir añadiendo las demás. Un consejo que podemos darte es que selecciones 2 o 3 que sean mayoritarios entre tu target objetivo y te centres inicialmente en ellos. A partir de este punto puedes crear plantillas base que te sirvan para los demás.
· COMODIDAD
Una vez tengamos claro con qué plataformas vamos a trabajar, es hora de pensar en la comodidad del usuario al utilizarlas. Crea botones grandes que se ajusten a todo tipo de personas y tamaño de dedos, ya que no todos son iguales. El tamaño mínimo recomendado es de 44×44 píxeles. Asegúrate además de que la fuente sea legible, con un tamaño mínimo recomendado de 22 píxeles para el título y 14 para el cuerpo.
· SIMPLICIDAD
Los usuarios no buscan información innecesaria, lo mejor es proporcionales la información que ellos demandan, todo ello acompañado de un diseño atractivo y un contenido de calidad. El diseño es el primer impacto, pero lo que de verdad decidirá que hagan click o no es la información. Procura que ésta sea transmitida de manera original y efectiva.
· REDUCCIÓN DE PROCESOS
El usuario busca comodidad, efectividad y rapidez. Si hay dinero de por medio, más motivo aún para facilitarle las cosas al usuario. Un enlace a tu aplicación móvil y una oferta de descarga por si aún no la tiene puede ser bastante efectivo. Si no dispones de aplicación específica para móvil, redirige al usuario a alguna web en la que pueda realizar la compra tras muy pocos pasos.
· EL ASUNTO: PUNTO CLAVE
El asunto de cualquier e-mail es clave para decidir si el usuario se decide o no a abrirlo. Hay que tener en cuenta, además, que cada proveedor establece un límite u otro de caracteres. Lo conciso y lo breve siempre es lo mejor, pero a la vez debe estar pensado y trabajado para que le resulte atractivo y original al usuario y le despierte la curiosidad para acceder a él.
Por último, recordar incluir alguna CTA al final de cada e-mail, con un diseño impactante e identificable a primera vista. ¿Os ha sido útil nuestro artículo?
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