El marketing digital ha traído consigo la disciplina del diseño web. Como disciplina, tiene sus propias particularidades y reglas. Uno de los principales elementos de esta es la creación de banners. Hoy nos vamos a fijar en los errores más graves y comunes a la hora de diseñarlos, muchos de ellos ligados a los inicios de internet y por tanto, del propio diseño web.

• Un banner muy pesado:

Se trata, sin lugar a dudas, de uno de los errores más graves que se pueden cometer y no por ello, de los menos frecuentes. Es muy importante que un banner no se exceda en efectos y/o información, ya que cuanto más recargado sea menos efectividad tendrá. Además del desinterés que pueda generar por ser recargado, si es muy pesado en cuanto a tamaño, puede dar problemas para cargarse y por tanto, no es que pierda cierta efectividad, la perdería toda. Un banner que no carga no sirve para nada, es un trabajo hecho en balde. Además, los usuarios cada día son más exigentes e impacientes y no esperarán a que tu banner cargue para pulsar en él si no lo hace al momento.

• Un banner sin un objetivo claro:

Cuando te dispones a crear un banner es fundamental tener claro el objetivo de este. Hay que definirlo de forma precisa, ya que esto ayudará a realizarlo de forma correcta y así, lograr el propio objetivo que has marcado. Esto sucede como con cualquier otra herramienta de una estrategia de marketing y los objetivos pueden ser tan variopintos como conseguir ventas, aumentar el tráfico de una web o dar a conocer un mensaje concreto.

• Un banner con exceso de mensaje:

Es fundamental no sobrecargar un banner con demasiado mensaje o contenido, ya que perderá efectividad por resultar poco interesante y/o confuso a los usuarios. Además, los espacios digitales para insertar banners acostumbran a ser pequeños. Por tanto, es aún más importante tener claro el objetivo para definir el mensaje correctamente y de manera concisa, sin extenderse.